El Presupuesto de la Comunidad Autónoma para 2022 entrará en vigor este viernes tras su publicación mañana jueves en el Boletín Oficial de la Región. Así lo anunció hoy el consejero de Economía, Hacienda y Administración Digital, Luis Alberto Marín, en la presentación al Consejo Económico y Social (CES) de las cuentas de la Comunidad, que suponen el blindaje de los servicios públicos y colocar a la Región de Murcia “en la senda para volver a liderar el crecimiento económico y de creación de empleo”.

En la reunión con el CES, el consejero informó de las principales líneas de actuación del presupuesto, que este año alcanza la cifra récord de 5.403 millones de euros. Esto supone un incremento de 72,2 millones con respecto a 2021 y de casi 600 millones con respecto a 2020.

El Gobierno regional invertirá diariamente 15 millones, de los que 12 se destinarán a prestar servicios públicos de calidad. La mitad de esos 12 millones diarios, a su vez, se invertirán en reforzar la Sanidad, mientras que 4,5 irán destinados a Educación y 1,4 millones diarios para políticas sociales.

El 80 por ciento del presupuesto (4.342 millones) recae en el blindaje de los servicios públicos inherentes al estado de bienestar, que son competencia de la Comunidad, mientras que el 13 por ciento se destina a partidas de reactivación de la economía (más de 700 millones) y el 7 por ciento restante corresponde al resto de servicios públicos, como protección civil o relaciones con la Administración Local.

Durante su exposición de las líneas maestras de las cuentas autonómicas, Marín expuso que la financiación del Estado cae en 160 millones de euros y lamentó que la Comunidad “sigue estando a la cola de la cola en financiación autonómica. En concreto, cada murciano recibe 2.614 euros frente a los 2.828 euros que reciben de media el resto de españoles”.

El consejero de Economía, Hacienda y Administración Digital volvió a reclamar la recuperación del Fondo Covid para seguir haciendo frente a la pandemia; la aprobación de un fondo de nivelación para las comunidades peor financiadas, mientras no se aprueba un nuevo modelo suficiente y equitativo; la reforma del sistema de financiación que ponga fin al maltrato que viene padeciendo el millón y medio de murcianos; y la compensación de la deuda generada por la infrafinanciación desde 2009.